Validación DNSH: revisión de la Memoria de Autoevaluación
La Autoevaluación del Cumplimiento del Principio DNSH es un requisito del Mecanismo Europeo de Recuperación y Resiliencia (MRR), que únicamente permite financiar aquellos proyectos que respeten el principio de “no causar un daño significativo”, o DNSH (en sus siglas en inglés – “Do no significant harm”).
Plan de recuperación, Transformación y Resiliencia en España
Con la aprobación del Plan de recuperación, Transformación y Resiliencia de España, la Unión Europea ha asignado fondos a España:
Durante los próximos meses y hasta finales de 2023, el Estado español emitirá nuevas ayudas, y adaptará las ayudas existentes que serán otorgadas a los proyectos de inversión o de reforma que se enmarquen en uno (o varios) de los 30 componentes contemplados en el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia.
El Mecanismo Europeo de Recuperación y Resiliencia (MRR) exige dos cuestiones:
- La organización que solicite ayudas para la ejecución de proyectos con cargo a la financiación de los fondos NextGen, debe presentar una Autoevaluación de DNSH del proyecto.
- Solo permite financiar a aquellos proyectos que respeten el principio de “no causar un daño significativo”, o DNSH (en sus siglas en inglés – “Do no significant harm”). Es decir, que la Autoevaluación DNSH realizada confirme que la ejecución del proyecto no causará un perjuicio significativo al medio ambiente.
Entre los criterios establecidos en el MRR se incluyen varios aspectos recogidos dentro del Reglamento 2020/852, entre los que destaca el Principio de No Causar un Perjuicio Significativo.
Se utiliza la Herramienta Next Gen para impulsar las Finanzas Sostenibles dentro del Marco de la Taxonomía. De hecho, las acciones y medidas desarrolladas en el MRR en materia ambiental están alineadas con los 6 objetivos ambientales de la taxonomía:
- Mitigación del cambio climático
- Adaptación del cambio climático
- Uso sostenible y protección de los recursos hídricos y marinos
- Economía circular, incluidos la prevención y el reciclado de residuos
- Prevención y control de la contaminación
- Protección y recuperación de la biodiversidad y los ecosistemas
Para estos objetivos se desarrollará un Acto Delegado que definirá cómo las actividades se alinearán con estos objetivos, y desarrollará su grado de compatibilidad. Actualmente se ha desarrollado el Acto Delegado para los dos primeros objetivos: mitigación y adaptación al cambio climático.
La taxonomía define una serie de requisitos aplicables a los criterios técnicos de selección: entre ellos el requisito de DNSH, el cual se ha considerado como un criterio de evaluación excluyente.
¿Qué es la validación de la Autoevaluación DNSH?
El proceso de validación consiste en la revisión de la Memoria de Autoevaluación (simplificada y/o sustantiva) de las actividades del proyecto que determine el cumplimiento de “no causar un perjuicio significativo” para considerar la verosimilitud de las conclusiones de esta Autoevaluación DNSH. Se indica si cada decisión sobre la afección significativa a cada objetivo medioambiental es verosímil, y si la base técnica de su justificación es sólida y razonable.
Se deberá tener en cuenta el ciclo de vida del proyecto en la evaluación del principio DNSH.
La Autoevaluación debe realizarla la propia organización para cada proyecto que solicite financiación europea y puede requerir un Informe de Validación de la misma. Este Informe de Validación debe ser emitido por una entidad acreditada por ENAC, que soporte las conclusiones de la autoevaluación y garantice que estas disponen de una base técnica y son razonables.
EQA España ha sido una de las primeras entidades acreditadas en España para Validar las autoevaluaciones de cumplimiento del Principio DNSH.