Lucas Sáenz de Buruaga . Mobility Center of Excellence Manager
El Compliance Officer es una de las figuras de mayor relevancia para las empresas con independencia del sector o ámbito territorial. Debe de ser una persona, que, en primer lugar, conozca muy bien su negocio, puesto que debe de comprender e implementar todos los procesos y procedimientos de la empresa y que, asimismo, tenga rigurosidad en el cumplimiento de su misión y en trasladar la importancia del cumplimiento normativo al resto de colaboradores. El ejercicio del Compliance Officer requiere, por tanto, de unas necesidades que gracias al estudio efectuado por Lefebvre pueden resumirse en las siguientes que aparecen detalladas: flexibilidad, contenido, multitarea y autonomía.
FLEXIBILIDAD
La complejidad normativa, nacional o internacional, como la propia idiosincrasia de las organizaciones sujetas a las obligaciones de cumplimiento, nos hizo ver desde el principio que crear soluciones ad hoc que se circunscribieran exclusivamente a un ámbito concreto del Compliance no iba a funcionar; en su defecto, teníamos que crear una plataforma que fuera capaz de adaptarse y crecer junto con nuestros clientes.
Así, nace Centinela, la plataforma sobre la que Lefebvre está construyendo todas sus soluciones compliance. Centinela no sólo favorece la capacidad de adaptarnos rápidamente a las necesidades del mercado, sino que permite al Compliance Officer centralizar la gestión de los diferentes programas a los que está sujeta su organización.
Esa capacidad de adaptación ya la hemos podido ver este 2019, con dos lanzamientos de calado. A principios de año, presentamos nuestra solución Compliance Protección de Datos (RGPD), orientada a la planificación, implantación y mantenimiento de los sistemas de protección de datos y este pasado 13 de noviembre, durante el Congreso de Compliance y Buenas Prácticas Tributarias celebrado en Barcelona, los asistentes conocían más detalles acerca del software Compliance Fiscal, presentado en marzo y centrado en la implantación de un sistema de evaluación y gestión de riesgos tributarios adaptado tanto al Código de Buenas Prácticas Tributarias como a la Norma UNE 19602.
SEGURIDAD
La segunda necesidad que detectamos, era la incertidumbre a la que se enfrenta el Compliance Officer a la hora de interpretar la norma, el hecho de que mucha de la normativa aplicable sea de recentísima aprobación y que la jurisprudencia o doctrina administrativa sea escasa o poco uniforme, genera una serie de riesgos interpretativos que es fundamental mitigar.
Para paliar dichos riesgos, en Centinela hemos incorporado los contenidos que nos han hecho líderes en el mercado de información jurídica, tanto es así que nuestra solución Compliance Fiscal incluye el Memento Fiscal, que lleva estando sobre la mesa de los Inspectores de Hacienda desde hace casi 30 años. A esto hay que sumar que nuestra división de formación ha creado cursos que complementan perfectamente a Centinela.
MULTITAREA
El profesional del compliance se enfrenta a una multitud de configuraciones en las organizaciones a las que sirve. Nos encontramos con casos que van desde organizaciones con una configuración muy simple hasta otras con multitud de filiales, probablemente en diferentes jurisdicciones, cuyos distintos contextos requieren de implementaciones variadas dentro de una misma organización; además, el Compliance Officer debe poder gestionar todas esas configuraciones de una manera centralizada.
Con Centinela creemos que hemos sabido dar cabida a esta necesidad, tanto para los casos en los que el profesional provee de servicios externos a terceras partes y por tanto tiene que mantener implantaciones independientes entre sí, como al que provee servicios en una misma organización pero el contexto de la misma le obliga a realizar distintas implementaciones.
AUTONOMÍA
Entendemos la necesidad de autonomía del Compliance Officer como la posibilidad de disponer de un sistema de gestión adaptado al nuevo contexto al que debe hacer frente. Aunque puede parecer tarea imposible, el Compliance Officer deberá facilitar este sistema de gestión para intentar cubrir las distintas configuraciones organizativas. El Compliance Officer tendrá en cuenta, entre otros aspectos, el tamaño de la organización, el nivel de madurez respecto al cumplimiento o la cultura corporativa para adecuar ese sistema de gestión al nuevo contexto. Esta autonomía del responsable del cumplimiento fue priorizada a la hora de desarrollar la plataforma Centinela. Consideramos ésta como una necesidad clave que solucionamos ofreciendo la capacidad de que el Compliance Officer pueda crear sus propios procesos adaptados a las necesidades específicas que requiera.